Elegante, efervescente y versátil. Así es el vino espumoso, una de las opciones con un número importante de seguidores dentro del universo de la vitivinicultura y que puedes encontrar en forma de tinto, blanco y hasta vino rosado. De hecho, es una elección muy popular en momentos especiales y celebraciones.
A menudo, cuando pensamos en los mejores vinos espumosos es el champán el primero que viene a la mente. Sin embargo, hay todo un universo más allá del tradicional ‘champagne’ con opciones tan deliciosas como fascinantes.
Tipos de vinos espumosos
Una de las señas de identidad más evidente en cualquier cata de vinos espumosos es su efervescencia, es decir, la presencia de burbujas de dióxido de carbono que se liberan al servirlos y pueden obtenerse de manera natural o artificial. Las técnicas de elaboración más populares son:
- Método tradicional o champenoise
Implica una segunda fermentación en la botella. Después de la fermentación inicial del vino base, se añade azúcar y levadura antes de sellar la botella con una corona. La fermentación secundaria produce dióxido de carbono, que queda atrapado en la botella, creando las burbujas características.
- Método Charmat
En este caso, la fermentación secundaria se realiza en grandes tanques presurizados añadiendo. Una vez que se alcanza el nivel de carbonatación deseado, el vino espumoso se filtra para eliminar la levadura y se embotella.
Desde los secos y refrescantes hasta los dulces y afrutados, los distintos tipos de vinos espumosos abarcan una amplia gama de estilos y sabores y son conocidos por su versatilidad. No obstante, algunos de los más famosos y mejores vinos espumosos son:
- Champagne. Comprar champagne es comprar inspiración. Este espumoso es elegante, complejo y de suaves burbujas y su origen está localizado específicamente en la región de Champagne en Francia.
- Cava. Originario de España, principalmente de Cataluña. Las variedades de uva Macabeo, Parellada y Xarel son las más populares para la elaboración de este vino espumoso, generalmente, más afrutado y fresco que el champán. En la actualidad, son cada vez más populares entre los mejores vinos espumosos los cavas ecológicos.
- Sekt (Alemania). El sekt es el término utilizado para referirse a los vinos espumosos alemanes. Pueden elaborarse con una variedad de uvas, incluidas Riesling, Pinot Blanc y Pinot Noir. Son conocidos por su carácter refrescante, a menudo con notas florales y frutales.
- Prosecco. Este espumoso de la región del Veneto (Italia) emplea el método Charmat y uva Glera para deleitar a los paladares con su carácter fresco, afrutado y ligero, con burbujas más grandes y persistentes.
Vinos espumosos Vs champán
Las preferencias personales y el momento de consumo marcan la elección de los mejores vinos espumosos. No obstante, el champán, o champagne en francés, es exclusivo de la región de Champagne, en Francia. Este vino espumoso se elabora principalmente a partir de uvas Chardonnay, Pinot Noir y Pinot Meunier, lo que le confiere su carácter distintivo. Se caracteriza por su complejidad aromática, con notas que van desde frutas frescas hasta toques de pan tostado y nueces.
En contraste, los vinos espumosos pueden proceder de diversas regiones del mundo y utilizan diferentes variedades de uva en su elaboración. Además, pueden encontrarse en una amplia gama de estilos, desde brut hasta vino espumoso dulce, mientras que el champán tiende a ser más seco.